Carboxihemoglobina

El monóxido de carbono (CO) es un gas que no emite olor, sin sabor y no irritante, por lo que su exposición puede pasar completamente desapercibida. Se origina de la combustión incompleta de los combustibles orgánicos.

El origen más frecuente de intoxicación con este gas son los incendios, en los que hasta el 50% de las muertes son debidas a esta intoxicación.

Una vez inhalado, el CO se combina con la hemoglobina de la sangre, que es un componente que suele ir en condiciones normales unido al oxígeno para repartirlo por todo el organismo.

El CO se une a la hemoglobina de una manera hasta 250 veces más fácilmente que con el propio oxígeno. Se produce el compuesto denominado COHb o carboxihemoglobina, que resulta unas 200 veces más difícil de separar que el compuesto de la hemoglobina con el oxígeno.

El resultado que se produce es una hipoxia o disminución del nivel de oxígeno en la sangre y tejidos, por mal transporte del O2 a dichos tejidos.

 

Sintomatología según porcentaje de carboxihemoglobina:

 

- 10 a 20%: comienzan a aparecer los síntomas de intoxicación por monóxido de carbono.

- 30%: se presenta intoxicación grave por monóxido de carbono.

- 50% a 80%: ocasiona intoxicación mortal por monóxido de carbono.

 

Valores Normales:

(Contenido de monóxido de carbono)

 

No fumadores: 0 - 1,5 %   (0,0 - 0,015)

Fumadores: 4 - 9 %   (0,04 - 0,09)

Inconsciencia y muerte: > 50 %   (> 0,50)

 

Muestra: Sangre total (WB)